top of page
  • Foto del escritorEduardo A. Saldivia

Policía de la ciudad de Posadas

Sin dudas una de las preocupaciones más importantes para cualquier vecino de una ciudad capital en la Argentina -como la nuestra- pasa por la seguridad.


Afortunadamente en la metrópolis de Posadas estamos lejos de los niveles de delincuencia que sufren ciudades como Corrientes o Resistencia, para citar los casos más próximos, pero de todas formas es un tema en el que hay mucho por hacer desde la gestión municipal.


En el área del Gran Buenos Aires encontramos ciudades de una escala similar a Posadas que han implementado los llamados Planes Integrales de Protección Ciudadana, impulsados principalmente por la instalación de sus sistemas de videovigilancia. Las posibilidades de persuadir preventivamente a los delincuentes que ofrece contar con cámaras en la vía pública son muy valiosas, por supuesto que no resolvieron la inseguridad, pero hacen un gran aporte para lograr calles más seguras y también colaboran notablemente en la resolución de cuestiones judiciales.


En el caso de nuestra ciudad, la central de monitoreo depende de la administración provincial y esta tarea es realizada por personal de la Policía de la Provincia y está bien que así sea, pero no quita que la ciudad pueda aspirar en algún momento a tener su centro de monitoreo propio, incluso para cuestiones de tránsito.


En los municipios del conurbano bonaerense todo lo que registran sus cámaras municipales es retransmitido por fibra óptica a la ciudad de La Plata para que también cuente con ellas el gobierno provincial. Algo que perfectamente podría implementarse acá, más aún cuando están todos tan próximos, dentro de la misma ciudad.


Pero el tema de las cámaras es sólo una parte de estos planes integrales, la protección ciudadana también contempla la creación de corredores escolares, calles delimitadas por las que los chicos pueden desplazarse para ir de la escuela a su casa o la parada del colectivo y cuentan con una especial presencia policial para la tranquilidad de todos. Por ejemplo, la calle La Rioja entre Buenos Aires y Junín, a primera hora de la mañana y al mediodía, podría ser un corredor para los chicos que van al colegio en el centro.


Es muy importante participar a todos los actores del plan y así como hoy existen los Foros de Seguridad, con mucho éxito, donde participa la ciudadanía, también pueden crearse las redes de Vecinos en Alerta en cada cuadra o dotarlos con botones de pánico, ya que -como aprendimos durante la cuarentena- no puede haber un policía vigilando a cada argentino, debemos cuidarnos entre todos y mientras llamamos al 911, los integrantes de la red pueden hacer sonar una alarma sonora que ponga a todos los vecinos en alerta de que algo no está bien.


En el exterior, el Estado puede pedirles además a las empresas de telefonía celular que les manden un mensaje de texto a todos los celulares prendidos en el área con un aviso, por ejemplo avisando sobre un niño perdido por si alguno lo ve y que sepa inmediatamente que lo están buscando.


Una pieza clave en este proceso de brindarle mayor seguridad a la ciudadanía ha sido la creación de las policías municipales. No reemplazan a la policía provincial y no tienen la capacidad arrestar a nadie. La policía municipal acompaña a los vecinos, da una presencia del Estado ahí donde la policía provincial no es necesario que llegue, liberando a la policía tradicional para que pueda enfocarse en otras tareas prioritarias.



La policía municipal puede recorrer zonas comerciales, los mencionados corredores escolares, la Costanera durante eventos y dar inmediato aviso a la policía ante cualquier novedad.


La presencia de un policía municipal nos garantiza que si pasa algo, los bomberos, una ambulancia o la policía van a venir enseguida, hay un agente municipal que se va a ocupar de ayudarnos.

En el caso de los vehículos que pertenecen a la policía ciudadana, hemos visto casos en los que el móvil y el conductor son de la municipalidad, pero transportan a un policía de la provincia para poder ir a dar apoyo inmediato a cualquier situación.


Estos planes pudimos verlos en los medios en ciudades como Tigre, San Martín o Tres de Febrero, donde hoy, mas allá de sus banderas políticas diferentes a la de la administración provincial, han hecho que la seguridad sepa ser una política de Estado.


En conclusión, la creación de una policía de la ciudad de Posadas mejoraría no sólo nuestra seguridad, sino la calidad de vida de todos. Como parte del Plan Integral de Protección Ciudadana que la capital de la Tierra Colorada merece.

4 visualizaciones0 comentarios
bottom of page